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El poder de Su resurrección



El poder de Su resurrección.


Filipenses 3:10  a fin de conocerle, y el poder de Su resurrección, y la participación de sus padecimientos, llegando a ser semejante a Él en Su muerte...


El poder de Su resurrección sobrepasa todo poder conocido, sobrepasa aún los mismos milagros que Jesús hiciera sanando enfermos, quitando lepra, pagando impuestos de la nada, sacando fuera demonios o caminando sobre el agua.  Ese poder es el poder que levantó de los muertos a Jesucristo, quitó la piedra de aquella cueva, simplemente para mostrar que esa tumba se encontraba vacía; es aquel poder que lo hizo sentar en el trono del Padre, ese poder que no tiene obstáculo alguno, ese poder que sale victorioso aún contra la fuerza más poderosa del universo: la muerte.


Sin embargo, así como para ver esas maravillosas madrugadas con celajes de coloridos impresionantes, primero debemos pasar por las tinieblas de la noche, o para valorar la abundancia del Señor, primero debemos conocer la escasez, o como para gozar la salud, primero debemos haber estado enfermos… para resucitar, primero debemos morir, porque para conocer el poder de esa resurrección, primero debemos llegar a ser semejantes a Él en Su muerte.


Al final, el último enemigo que será destruido es la muerte (1corintios 15:26), y el poder de la resurrección vencerá dándole el golpe final.  ero mientras esto sucede, y mientras morimos cada día, tomando nuestra cruz (Lucas 9:23), Ese poder nos motivará a ir a la Gólgota menospreciando la verguenza, sabiendo de antemano que después de la cruz hay algo supremamente mejor. Debemos tener fe en ese poder (Colosenses 2:12), porque ese poder obrará por nosotros, haciendo en nosotros lo que es agradable para Dios (Hebreos 13:20-21), levantándonos de los muertos, no solo al final de los tiempos, sino también en esta vida, dándonos vida en abundancia.  Amén.

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